SANTO DOMINGO.- La joven Yocairi Amarante, roceada con ácido del diablo en un ataque planificado y pagado por su expareja, espera que este 2021 se haga justicia por su caso.
La joven se mostró esperanzada por las operaciones que le harán en el rostro, con ayuda del presidente, Luis Abinader, y la primera dama, Raquel Arbaje, quienes respondieron a su llamado para financiaran las intervenciones que se hará en aproximadamente seis meses.
El Ministerio Público, representado por los fiscales Carolin Junesca De Oleo y Vladimir Lenin Viloria Ortega, solicitó auto de apertura a juicio, así como que sean validadas todas las pruebas aportadas por la investigación, ya que estas fueron incorporadas de conformidad con la norma procesal vigente. El documento agrega que dichas evidencias son legales, pertinentes y útiles para acreditar la teoría de la acusación.
Asimismo, el órgano persecutor requirió que se mantenga la medida de coerción consistente en prisión preventiva, que los imputados cumplen en el centro penitenciario El 15 de Azua.
Según la investigación realizada por el Departamento de Investigación de Crímenes y Delitos Contra las Personas de la Fiscalía del Distrito Nacional, Willy Antonio Javier, expareja de Yocairi Amarante, ofreció la suma de RD$25,000 a “Alex” y pagó un adelanto de RD$3,500 para que perpetraran el ataque con “ácido del diablo”, una mezcla de sustancias corrosivas que queman la piel y el tejido. Los imputados se pasaron aproximadamente 15 días planificando el crimen.
El documento acusatorio está sustentado por pruebas documentales, testimoniales, materiales, periciales e ilustrativas, y detalla que el crimen sucedió el pasado 25 de septiembre, mientras la víctima se desplazaba por el Ensanche Luperón en el asiento delantero de un carro público, tras salir de su trabajo.
Los imputados Pedro Alexander Sosa Méndez y Joan José Féliz la siguieron a bordo de una motocicleta y se acercaron al auto para que este último lanzara la sustancia química al rostro de la joven.
Los fiscales recordaron que, a causa de los sancionables actos cometidos, la joven resultó con quemaduras graves en diferentes partes del cuerpo, por lo cual fue sometida a varias cirugías; también el conductor del carro público presentó quemaduras múltiples en brazo, costado y pierna derecha.
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