Con un velo de misterio se maneja el caso del asesinato a tiros del prófugo Jorge Gabriel Báez Abreu y de cuatro personas que resultaron muertas, tras ser interceptados a tiros cuando se desplazaban a bordo de una yipeta en el municipio de Guerra, de Santo Domingo Este.
Aunque la Policía Nacional y el Ministerio Público dio a conocer las versiones sobre los hechos ocurridos por separados, han surgido diferentes hipótesis.
Báez Abreu fue ultimado el 27 de diciembre pasado por agentes policiales, en un supuesto enfrentamiento a tiros, ocurrido en la comunidad de Villa González, donde también resultaron heridas dos personas que supuestamente acompañaban a Báez.
En el caso de Báez Abreu, condenado a treinta años de prisión y quien se había fugado de un centro de salud de Nagua con ayuda de un grupo de hombres armados, la versión oficial fue que fue asesinado por agentes de la Policía Nacional cuando se “enfrentó” a disparos en la comunidad de Villa González, donde también resultaron heridos Jesús Peralta y Quintero Amparo Paredes. Sin embargo, el ex regidor Waldys Taveras, alegó que el crimen Báez Abreu fue por una transacción de diez millones de pesos, según comunitarios del lugar donde lo asesinaron.
Mientras que en el caso de los asesinatos de las cuatro personas que se trasladaban en una jeepeta en el municipio de Guerra, el director de la Policía Nacional, mayor general Ney Aldrin, descarta que se trate de un asalto.
Mientras que cercanos de las víctimas alegaron que “ellos no eran de na” y que eran personas de trabajo.
Las cuatro personas que fueron asesinadas a las 3:00 de la madrugada del 29 de diciembre pasado, fueron Roberto Híchez, Pablo Celedonio, Librada Zapata y Eladia Sabino de la Cruz.
