Las últimas semanas de mayo y las primeras de junio han sido marcadas en la historia estadounidense por las protestas en contra del racismo y la brutalidad policial. Desde la muerte injustificada de George Floyd a manos del agente policial de Mineápolis, Derek Chauvin, el país se ha convertido en una zona de erupciones, por un lado violentas y por el otro pacíficas.
Mientras la prensa norteamericana y las redes sociales muestran videos de las agresiones de los agentes hacia los manifestantes y las cifras de los ciudadanos muertos a manos de estos por año, pocos se apuran en mostrar las cifras de muertes de los policías en incidentes con criminales.
El reporte LEOKA 2018 (Law Enforcement Officers Killed and Assaulted en inglés) del Buró Federal de Investigación (FBI), dice que la cifra para ese año fue de 106 agentes muertos. De estos, 55 fueron asesinados en ataques criminales, 11 de ellos emboscados. Los otros 51, murieron en incidentes relacionados con el tránsito. En el 2017, el total de agentes muertos fue de 93, en el 2016 fueron 118 y en el 2015, la cifra total fue de 86.
Otro reporte del Fondo Nacional de Conmemoración de Oficiales de la Ley muestra números mayores. Este dice que en el 2015 murieron 162, en el 2016 fueron 174, en el 2017, 171, en el 2018 la cifra fue de 157 y en el 2019, el total fue de 128.
Este informe que presenta año tras año la organización categoriza los fallecimientos por: relacionados con armas de fuego, relacionados con el tráfico y otros. Por armas de fuego, en el 2019, 49 oficiales murieron en incidentes con armas, 27 de estos por disparos de pistolas. En el 2018, fueron 52 los oficiales asesinados con armas de fuego.
En el 2019, 43 oficiales murieron en incidentes relacionados con el tráfico, seis menos que en el 2018. Al menos 30 fueron embestidos o murieron en una persecución durante el 2018 y 25 en el 2019.
El reporte muestra que en el 2018, 4 oficiales fueron ahogados, 1 en el 2019. También cuatro murieron por golpizas, dos para cada año mencionado anteriormente. Y uno estrangulado en el 2019.
Según el conteo por estado en lo que va del 2020, 52 agentes han sido asesinados:
Texas (10), California (3), Georgia (3) Louisiana (3), South Carolina (3), Alabama (2), Florida (2) Hawaii (2) Indiana (2), Missouri (2), New York (2), Oklahoma (2), Pennsylvania (2) Arizona (1), Arkansas (1), Connecticut (1), Idaho (1), Illinois (1), Kansas (1), Michigan (1), Nevada (1), North Carolina (1), North Dakota (1), Ohio (1), Utah (1), Virginia (1), Washington (1).
- Hay más de 800,000 agentes de la ley jurados que ahora prestan servicios en los Estados Unidos, la cifra más alta de la historia. Alrededor del 12 por ciento de estos son mujeres.
- Un total de 1,627 agentes de la ley murieron en el cumplimiento de su deber durante los últimos 10 años, un promedio de una muerte cada 54 horas o 163 por año.
- Hubo 58.866 asaltos contra agentes de la ley en 2018, lo que resultó en 18.005 lesiones.
- El Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York ha perdido más oficiales en el cumplimiento de su deber que cualquier otro departamento, con 941 muertes. Texas ha perdido 1.772 oficiales, más que cualquier otro estado. El estado con menos muertes es Vermont, con 24.
- Hay 365 mujeres oficiales que figuran en el Memorial del Fondo Nacional de Conmemoración de Oficiales de la Ley; 11 mujeres oficiales fueron asesinadas en 2019.
