SANTO DOMINGO.- El presidente del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) declaró este miércoles que ve con simpatía el acuerdo a que arribaron el presidente de la República, Luis Abinader, y su homólogo de Haití, Jovenel Moise, por su carácter histórico y trascendente.
Quique Antún dijo, de acuerdo a un comunicado, que los temas acordados entre los dos mandatarios se corresponden con las recomendaciones que en varios momentos ha planteado públicamente el PRSC, por lo que entiende que este acuerdo es un paso de avance “porque se trata del inicio de la implementación de una política pública respecto del vecino país”.
Insistió en que “hay que mantenerse vigilante y ojo avizor ante la comunidad internacional y el propio Estado haitiano, para asegurar que contribuyan a crear las mejores condiciones para gestionar un problema migratorio que posteriormente pueda degenerar en situaciones lamentables”.
El líder reformista entiende, sin embargo, que ya era tiempo de tomar una acción decidida en la dirección de controlar los flujos transfronterizos, “en ánimo de preservar nuestra soberanía e integridad nacional”.
Consideró como acertada la decisión de establecer un marco de cooperación entre los dos países para iniciar un proceso de dotar de identidad legal, con documentación haitiana, a los nacionales de ese país que se encuentren en territorio dominicano de forma irregular.
Sugirió definir un mecanismo institucional que permita realizar tal proceso, sin menoscabo de nuestra soberanía y nuestro andamiaje jurídico e institucional, habidas cuenta de que la gran mayoría de los nacionales haitianos que se encuentran en territorio dominicano, carecen de documentación haitiana, lo que les hace tener un estatus de ilegalidad en nuestro país. Este es un aspecto que debe ser clarificado en este acuerdo pactado entre las dos naciones.
El presidente del PRSC manifestó que ello contribuirá grandemente, no solo a controlar la migración irregular, sino, también, a establecer mayores y mejores controles migratorios, en una frontera abierta, porosa y débil de 292 kilómetros.
Quique Antún dijo que se identifica con el anuncio de estimular la construcción de hospitales en el lado haitiano, para asegurar que el sistema de salud del vecino país pueda dar los servicios de salud a las tantas embarazadas haitianas que cruzan al lado dominicano a dar a luz, demandando más de 5 mil millones de pesos al año del presupuesto nacional.
“Desde hace un tiempo habíamos propuesto que la comunidad internacional participe en un programa efectivo de construcción de infraestructuras sociales en el vecino país”, dijo.
Señaló que este acuerdo trascendental leído por el canciller Roberto Álvarez “abre la posibilidad de hacer realidad algo que hemos propuesto públicamente desde hace varios meses: la factibilidad de la construcción de una barrera física, que ponga un alto a la migración irregular desde Haití y disminuya la evasión de los controles fronterizos”.