Según explica el canal WTAE-TV Pittsburgh, Kaycee y Geoffrey Lang simularon, en primera instancia, el embarazo de su "primer hijo" para recibir regalos y dinero de su círculo íntimo. La mujer se mostraba con una panza prominente en las redes sociales e incluso celebraron el tradicional "baby shower", donde obtuvieron varios presentes.
Luego, en el mes de julio, anunciaron que su bebé había nacido, compartiendo nuevamente fotos del feliz evento en sus cuentas de Faceook. Pero, al poco tiempo, revelaron sorpresivamente que su hijo había muerto horas después del parto. Ante semejante hecho, la pareja solicitó dinero para el entierro de "Easton", como lo habían nombrado. Para esto, lanzaron una iniciativa a través de la plataforma colaborativa GoFundMe, sitio donde aceptaban donaciones de hasta 600 dólares.
Tras el anuncio del funeral, Kaycee y Geoffrey confirmaron que "incineraron" en una urna los restos de su bebé. Pero una amiga cercana a la mujer, Cynthia Dilascio, sembró dudas en la historia de la pareja y se acercó hasta la funeraria para constatar la veracidad de la historia. Allí le confirmaron que no existía ningún registro con el nombre de "Easton Lang", tras lo cual Dilascio llamó a la Policía y denunció los hechos.
Las autoridades llevaron adelante una orden de allanamiento en la casa de los Lang, donde encontraron una muñeca que imitaba a una recién nacida y una urna personalizada con el nombre del supuesto hijo, entre otros artículos.
Así mismo, confirmaron que no hay registros de ninguno de ellos en el hospital donde nació su bebé o en la oficina forense. La pareja enfrenta cargos de robo por delitos menores y deberá comparecer ante un tribunal en el mes de octubre.
