Los familiares y abogados de Aquiles Christopher, quien cumple prisión preventiva tras ser imputado en el caso Pulpo, aseguraron que el acusado fue evaluado por médicos legistas del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), quienes confirmaron su situación grave de salud.
“Luego de semanas insistiendo, al fin este (Aquiles Christopher) fue evaluado en fecha 7 de julio por médicos legistas del Inacif, así como todos sus documentos, estudios, certificados y recomendaciones médicas, las cuales establecen que el mismo tiene una enfermedad cardíaca, que se ha agravado en la cárcel”, indicaron.
En un comunicado de prensa, los abogados de Christopher dijeron que tras el imputado haber sufrido dos infartos en el pasado, los estudios demuestran que sus parámetros cardiacos evidencian el riesgo de un evento inminente que podría comprometer su vida.
“Por tanto el lugar ideal para poder reaccionar a un evento de esa naturaleza es su domicilio, desde donde sería trasladado con mayor efectividad ante sus médicos, quienes sugieren estudios para practicar cateterismo y procedimiento de stent a fin de evitar la muerte del señor Aquiles Christopher. El Inacif es una dependencia del Ministerio Público y el juez que revisó la medida de coerción fue quién sugirió que estos estudios fueran validados por el Inacif, lo cual ya ha sido cumplido”, explicó la defensa.
Dijeron esperar que con esta prueba “el sistema de justicia le garantice la vida a Aquiles Christopher variando la medida de coerción”.
Un médico certificó que Aquiles Christopher, el exfiscalizador de la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado (Oisoe) y acusado en el caso Pulpo, podría sufrir una muerte súbita en cualquier momento, debido a su deteriorada salud, y pese a esta situación un juez le confirmó el pasado 9 de junio la prisión preventiva.
El magistrado Amauris Martínez, del Tercer Juzgado de Instrucción del Distrito Nacional, tomó la decisión luego de rechazar una solicitud de revisión de la prisión preventiva interpuesta por el imputado, quien presentó evaluaciones médicas que indican que, tras los seis meses que tiene recluido, su situación del corazón se ha agravado y recomiendan que se le realice un cateterismo urgente para evitar “un grave riesgo de muerte”.
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