SANTO DOMINGO.- En Santiago, el sistema hospitalario está al borde del colapso debido al acelerado repunte de la pandemia, lo que mantiene desesperada a la población.
El hospital José María Cabral y Báez y dos de las principales clínicas privadas, ya tienen saturadas sus áreas para atender casos de COVID-19 y donde varios pacientes deben aguardar horas en las salas de emergencia antes de ser ingresados.
Esa situación mantiene preocupados a los ejecutivos de esos centros asistenciales, debido al incremento de la enfermedad
Debido al aumento del COVID-19, las autoridades sanitarias buscan alternativas, que permitan contar con más espacios disponibles, ante las eventualidades que se presenten.
Como una forma de evitar mayores contagios, un cuerpo de inspectores de Salud Pública, se concentran en las principales arterias comerciales de Santiago, orientando a la población de cómo evitar males peores.
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