Nueva York: Apenas al comenzar su turno como operador de trenes el lunes por la tarde, Eric Boyo vivió la experiencia más estresante en sus 27 años trabajando para la Autoridad Metropolitana de Transporte (MTA).
Cuando el tren G que estaba conduciendo se acercó a la estación Fulton Street en Brooklyn, un hombre le hizo un alerta que salvaría una vida.
“A medida que me acerco un poco más, veo que hay alguien en la cama de la barandilla debajo, (…) así que apreté los frenos muy fuerte”, recordó.
Una mujer había saltado a las vías. Los testigos dijeron luego que ella estaba tratando de quitarse la vida. Pero el operador Boyo logró detener el tren a 75 pies de la víctima.
“Salí al porche delantero del tren y le pregunté a esta persona si estaba bien y ella indicó que quería volver a levantarse”, dijo.
Boyo y un pequeño grupo de pasajeros la llevaron de vuelta a la plataforma.
La mujer finalmente fue escoltada por un supervisor de la MTA fuera del Metro y llevada a un hospital local.
Todo el episodio dice que Boyo es un héroe, pero si le preguntas, no se siente como uno. “Si estamos alertas y usando el sentido común y tus reflejos son buenos, esto es lo que hacemos”, explicó a Pix11.
“Si tienes una luz en tu teléfono o una linterna y vas de un lado a otro de la pista, esa es nuestra señal para parar”,dijo Boyo. “Lo veremos antes que nada”.
Fuente: eldiariony
