Por; Alberto Quezada
La muerte natural del General (r) del Ejército de la República Dominicana (ERD) Enrique Pérez y Pérez, acaecida recientemente en la República Dominicana, debe provocar una enorme sensación de dolor en aquellos ciudadanos amantes de la justicia y verdad histórica completa.
Hacemos la afirmación dado el hecho de que la desaparición física de este personaje icónico de la historia dominicana, aleja toda posibilidad de conocer de su voz o pluma una parte importante de la verdad de aquella oprobiosa Era de los 12 años de Balaguer (1966-1978), en donde él fue actor de primera línea.
Por ejemplo, que interesante hubiese sido para las presentes y futuras generaciones, conocer un libro u otra publicación de su puño y letra, sobre la estrategia militar imperial denominada ¨Operación Limpieza¨, implementada el 13 de mayo 1965.
Asimismo, que reconfortante sería para los curiosos de la historia e historiadores tradicionales que el fenecido ex secretario de las Fuerzas Armadas y Jefe de la Policía Nacional, hubiese dejado algún relato de su autoría sobre el secuestro del coronel norteamericano Donald J. Crowley, agregado militar de la Embajada Norteamericana en Santo Domingo, el 24 de marzo de 1970.
De igual manera, que fantástico hubiera sido el conocer de su propia voz algunas declaraciones o entrevistas sobre los asesinatos de Maximiliano Gómez Horacio (El Moreno), el 21 de mayo de 1971, en Bruselas, Bélgica; Otto Morales, el 16 de julio 1970; Amín Abel Hasbún, el 24 de septiembre 1970.
También, hubiese sido interesante haber conocido su versión sobre su participación -o no- en la materialización de los asesinatos de Homero Hernández, el 22 de septiembre 1971; así como las de los jóvenes del Club Héctor J. Díaz, el 9 de octubre de 1971; en el barrio 27 de febrero.
Hubiese resultado magnifico, el haber conocido su confesión sobre la preparación de los asesinatos de Los Palmeros y Amaury Germán Aristy, el 12 de enero 1972; de Sagrario Díaz, el 14 de abril de 1972.
Igualmente valioso, el haber tenido acceso a su versión sobre los horrendos asesinatos de Francisco Alberto Caamaño, 16 de febrero 1973; del periodista Gregorio García Castro, 28 de marzo 1973; y el también periodista y analista político Orlando Martínez, el 17 de marzo 1975, entre otros.
Por eso y otras cositas, que dolor hoy siento por la muerte del General (r) Enrique Pérez y Pérez. ¡Que dolor siento!
