SAN CRISTÓBAL – Por la suma de $25,000 pesos vendieron el carro del taxista, los sujetos que acabaron con la vida al taxista de 66 años, cuyo cuerpo fue encontrado en estado de descomposición en Villa Altagracia, provincia San Cristóbal, después de varios días que lo reportaran como desaparecido.
Se trata de Juan Ernesto Medina Ramírez, desapareció el viernes 17 de este mes, luego de que saliera a ofrecer un servicio de transporte de Santiago hacia Santo Domingo.
Las autoridades revelaron los nombres de los supuestos responsables del hecho, se identificaron como Luis Ángel Pereyra Gómez, alias Tanyer, de 26 años; José Domingo Rodríguez, “El Máster”, de 23; Esmervin Antonio Cabrera Tavárez, de 27, y Elisa del Carmen Sánchez Rodríguez, de 31, quienes habrían vendido por $25,000 pesos el vehículo Hyundai N20, año 2009, color rojo, despojado al taxista.
Según el informe de la Policía, el Máster habría confesado que por una deuda que el occiso contrajo con él, contrató a Tanyer y a Esmervin, para que solicitaran un servicio como taxista a Medina, lo raptaran y le quitaran la vida.
El informe reseña que el teléfono celular del taxista fue encontrado en poder de la mujer.
El vehículo del trabajador del volante fue recuperado en la parte trasera de una vivienda en el barrio Los Solares del sector Bella Vista, al sur de Santiago, a donde lo habría llevado Carlos Matos, a quien la Policía persigue ya que habría sido la persona que lo compró a los responsables.
La Policía cree que los detenidos están involucrados en otros casos, debido a las evidencias recolectadas en varios allanamientos.
En la residencia de alias “el Máster”, los agentes investigadores del Dicrim, se ocuparon de cuatro celulares, varios recibos de pagos a nombre de varias personas, una tarjeta de vacunación a nombre de su amigo, alias Tanyer, y la copia de una matrícula correspondiente a un jeep Cherokee.
Además, indican que en la parte trasera de la vivienda allanada, en unos terrenos baldíos, los agentes se ocuparon de una cartera de hombre, que contenía la cédula de identidad del ciudadano Junior Javier Jáquez Lora.
Las autoridades le hacen el llamado a Carlos Matos para que se entregue.
El cuerpo del taxista estaba entre matorrales y en avanzado estado de descomposición. Al lado del cuerpo sin vida, los agentes de la Policía colectaron una sonda que el taxista utilizaba, por sus padecimientos de la próstata.
Juan Carlos Medina, hermano del taxista, pidió a las autoridades que el hecho de su pariente sea esclarecido y se establezca el móvil.
Entrevistado por Diario Libre, aseguró que la información que la familia maneja es muy escueta acerca del hecho y piden que aceleren las investigaciones.
De su pariente dijo que era una persona que padecía varias aquejantes de salud, incluyendo la próstata, que lo obligaba a hacer uso de una sonda.
Sin embargo, a sus 66 años, el taxista se sentía productivo y con fuerzas para seguir trabajando.
