HATO MAYOR.– Ante el paso de la tormenta Isaías por el país muchas familias perdieron sus viviendas y pertenencias por las inundaciones, principalmente en la provincia Hato Mayor, donde se reportaron más de 700 familias desplazadas.
El drama vivido por los residentes en el callejón Guabanismo del sector de Gualey, próximo al río Magua, es narrado por Nicolás Núñez, segundo consejero de la Rama Hato Mayor de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, a quien su casa se le inundó hasta la altura del techo, solo salvando lo más preciado: su vida, la de su esposa y sus dos hijos de 7 y 11 años, quienes se refugiaron en casa más segura de un vecino y ya pasada la tormenta con otros familiares.
Según narró Núñez, hace dos años el sector se inundó por primera vez y atribuyeron el hecho a que el río tenía mucha sedimentación, pero en esta ocasión se había dragado, limpiado y ampliado su cauce por lo que no se esperaban que las aguas subieran y les sorprendiera desprevenidos.
Núñez cuenta que perdió su carro y todos los ajuares del hogar, pero que no teme porque entiende que todo tiene un propósito en la vida.
“Uno debe continuar, porque con el Plan de Salvación venimos a la tierra para aprender y saber desenvolverse y comprender que todo tiene un propósito y que uno debe seguir hacia adelante”, afirmó Núñez mientras limpiaba su casa para luego ir en ayuda de otras personas afectadas,quienes necesitan alimentos, colchones, ropas, algunos electrodomésticos, zinc y maderas para reparar sus viviendas.
La Rama de Hato Mayor de la Iglesia es parte de La Estaca La Romana, contando con más de 4,000 miembros en esta área del país. Sus líderes están dando acompañamiento al hermano Nicolás y su familia y a la vez realizan un levantamiento de la situación de los afectados y sus necesidades a fin de mover voluntades entre su membresía, en procura de ayudar a los más necesitados
FUENTE:elnuevodiario