Por; Rubén Moreta.
Con tristeza, la ciudad de San Juan de la Maguana dice adiós a una consagrada maestra de generaciones de niños y jóvenes: Doña Nerys Migdalia Nin.
La Profesora Nin dedicó su vida a la formación integral de niños y jóvenes, especialmente desde la Escuela Enriquillo, donde iluminaba con tesón y amor a niños y jóvenes en situación de vulnerabilidad de los sectores empobrecidos de Guachupita, Quijada Quieta y Los Cartones, muchos de los cuales logró rescatar de ófricas sendas.
Doña Migdalia Nin vivió su vida mirando siempre hacia adelante, con altura de mira, con rectitud, responsabilidad, sembrando valores entre sus discípulos, y queriendo y amando a sus seis hijas: Bolivia, Eddy Jeannette, Jesusa, Sandra, Grissel y Pilar. Para sus apreciadas hijas, toda nuestra solidaridad en este momento de tanto dolor.
El novelista e historiador Henri Adams señaló que “El maestro deja una huella para la eternidad; nunca puede decir cuando se detiene su influencia”. El influjo de la acción constructiva de la Profesora Migdalia Nin trascenderá su partida terrenal por los cimientos cognoscitivos sembrados en las comunidades donde proyectó su fecunda obra magisterial.
¡Salve Gran Maestra!
El autor es Periodista.
