Aunque no mencionan la posibilidad de un paro en las atenciones médicas, el CDC denuncia la mala gestión de estas compañías en perjuicio de los galenos y los mismos afiliados.
Según un comunicado de la filial, muchos de sus miembros tienen años esperando un código para contrato de trabajo y al no otorgarlo los obligan a trabajar por el salario que establecen los dueños de clínicas, provocando que los afiliados tengan que pagar diferencias elevadas, cuando el objetivo de contar con una ARS es que ésta evite este tipo de situaciones y proteja al afiliado.
De acuerdo con el gremio, las ARS también privan a los afiliados de coberturas de vanguardia, como laparoscopía, suturas mecánicas e instrumental para reducir riesgos de sangrado u otras lesiones como el caso de daño a los nervios en la cirugía de tiroides.
“Avisamos que, si estas empresas no cambian de postura, y llaman al diálogo para mejorar la cobertura de servicios a los pacientes y descontinuar el maltrato a los cirujanos, a partir del plazo de 15 días dado por la junta directiva nacional (anunciado a través de la filial Norte CDC), estaremos realizando una serie de actividades para lograr que nuestros requerimientos sean atendidos”, indican en el comunicado.
Según comunicó el gremio, llevan 10 años de "reclamos infructuosos", apostando al diálogo y la concertación, y tratando de evitar la confrontación.
El colegio que agrupa a los médicos cirujanos del país buscan con sus protestas que las ARS asignen más recursos para ampliar la cobertura para los procedimientos que requieran los afiliados y hacer más justo el pago de los profesionales.
Fuente: https://noticiassin.com
