Por; Pedro Castro.
Actuar de la forma que se ha hecho frente a exfuncionarios no es más que manifiesto de resentimiento, de personas que en el pasado reciente aspiraban una posición y no fueron favorecidas. En su momento las contradicciones quedarán al descubierto porque conocemos del carácter de la magistrada procuradora general de la República Miríam Germán Brito.
Es un secreto a voces que se aprovecharon de la ausencia, por problema de salud, de la procuradora para hacer lo que hicieron y tuvieron que rendir un informe a la máxima autoridad del Ministerio Público.
Para justificar su accionar sostienen que los encartados estaban borrando evidencias, ¿oh y no es el Ministerio Público que debe tener esas evidencias? Aislar a la Fiscal del Distrito Nacional en los casos que tienen que ver propiamente con su jurisdicción no es más que resentimiento.
Quién se atreverá y podrá pedirle cuenta algún día a Yeni Berenice Reynoso de unos apartamentos incautados, algunos en el sector El Millón, que ordenó el usufructo a funcionarios del Ministerio Público o de un archivo definitivo de un expediente en favor de una entidad con sede en el Cibao.
Los que conocen la ley deben actuar apegado a la ley porque de repente se le puede virar la torta. No se puede actuar por venganza ni muchos menos personalizar los casos, porque en algún momento la vida misma se lo cobrará.
Estoy totalmente de acuerdo que el que cometió un ilícito penal sea procesado, siempre respetando el debido proceso.
Le hace daño a cualquier proceso actuar como lo hicieron frente al exministro de Salud Pública Freddy Hidalgo, que ni la ropa le permitió ponerse.
No defendiendo a corruptos ni corruptores, sólo que se aplique la ley y tengo conocimiento de que Hidalgo, nunca fue interrogado por las autoridades, al menos que fuera en secreto.
