REDACCIÓN.- Megan Firth, una joven de 18 años de Oxfordshire (Reino Unido), se pasa la mayor parte del día durmiendo debido a una rara afección conocida como síndrome de Kleine-Levin o, más popularmente, de la bella durmiente. La estudiante de la Universidad de Nottingham puede dormir hasta 20 horas al día sin despertarse.
Este año, cuando su familia festeje la Navidad, lo más probable es que Megan se encuentre durmiendo en su cama, según revela ella misma a medios británicos. Normalmente, cuando está con la familia duerme en la sala de estar, rodeada de sus familiares, que no la despiertan porque saben que ello puede empeorar su condición.
Por lo general, la joven tiene que retirarse antes de las fiestas estudiantiles, volviendo a casa antes de medianoche. “Por suerte, he hecho muy buenos amigos que han sido muy comprensivos, pero todavía tengo que pensar en ello [en el síndrome] todo el tiempo. De lo contrario, si me acuesto demasiado tarde, puedo desencadenar otro episodio [de complicaciones] y quedarme en cama durante varias semanas”, confiesa.